(1613-1680)
Escritor francés
Lo que hace que los amantes no se aburran nunca de estar juntos es que se pasan el tiempo hablando siempre de sí mismos.
El verdadero amor es como los espíritus: todos hablan de ellos, pero pocos los han visto.
Si juzgamos el amor por la mayor parte de sus efectos, se parece más al odio que a la amistad.
Si quieres tener enemigos, supera a tus amigos; si quieres tener amigos, deja que tus amigos te superen.
El mejor medio de conservar los amigos es no pedirles ni deberles nada.
En los celos hay más amor propio que amor.
Nunca se tiene la libertad de amar o de dejar de amar.
Cuanto más se ama a un amante, más cerca se está de odiarle.
El medio más fácil para ser engañado es creerse más listo que los demás.
Los celos se alimentan de dudas.
El deseo de parecer listo impide el llegar a serlo.
La inteligencia no podría representar mucho tiempo el papel del corazón.
Lo que hace que la mayoría de las mujeres sean tan poco sensibles a la amistades que la encuentran insípida luego de haber probado el gusto del amor.
Es más necesario estudiar a los hombres que a los libros.
Solemos perdonar a los que nos aburren, pero no perdonamos a los que aburrimos.