(1844-1900)
Filosofo alemán
Todo lo que se hace por amor, se hace más allá del bien y del mal.
La verdad es que amamos la vida, no porque estemos acostumbrados a ella, sino porque estamos acostumbrados al amor.
Los que más han amado al hombre le han hecho siempre el máximo daño. Han exigido de él lo imposible, como todos los amantes.
El hombre se define como ser que evalúa, como ser que ama por excelencia.
La edad de casarse llega mucho antes que la de quererse.
Sólo comprendemos aquellas preguntas que podemos responder.
La mentira más común es aquella con la que un hombre se engaña a sí mismo. Engañar a los demás es un defecto relativamente vano.
Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado.
El sexo es una trampa de la naturaleza para no extinguirse.
La madurez del hombre es haber vuelto a encontrar la seriedad con la que jugaba cuando era niño.
La potencia intelectual de un hombre se mide por la dosis de humor que es capaz de utilizar.
La espiritualización de la sensualidad se llama amor.